La tierra del hambre,
sera arada por bueyes desnutridos.
que tiraran del carro del carro de la miseria
con su esqueleto de barro,
Haciendo surcos en el huerto de raíces muertas.
Donde vendrán a comer los rebaños de la angustia.
que tienen colgando en su boca,
el hilo de silaba seca,
con el que riega los campos donde se pudren
las raíces junto a sus calaveras.
En la tierra del hambre,
crecen unos arboles cuyos frutos
tienen al aire los huesos
y las vacas escuálidas dan agua
para dar de comer a los muertos.
y de su suelo seco,
brotaran bocas con los libios hacia arriba.
cuya hambre sera paliada
con una lluvia de ramas quemadas y ortigas
En la tierra del hambre,
los niños lloran,
intentado saciar su sed penas.
Mamando del pezón agrietado de la arena.
para poder calmar así su sed
bebiendo la leche agria de la miseria.
Y se marchitan los estómagos,
esperando bajo el fuego de la desesperanza.
una lluvia de trigo que no llega.
En la tierra del hambre,
se mueren los esqueletos de la abundancia.
con costillas al aire,
mostrando restos de carne seca.
De donde picotean los buitres desplumados
arrancando trozos de piel al suelo.
que junto a las amapolas,
cuelgan como tristes hilos de una muñeca de trapo
que tienen sus venas abiertas.
En la tierra del hambre,
el sol ya no se pone tras el horizonte que se aleja.
Su cadáver quedo colgando del cielo
Como una marioneta inerte que tiene una soga al cuello.
y las nubes que lo adornan no son de algodón,
sino cebollas afiladas
que se clavan en las entrañas del pueblo.
Haciéndoles llorar
mendrugos de pan tierno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario